viernes, 17 de noviembre de 2017

Recuerdos del ayer


Anoche decidí quedarme despierta para ver "Recuerdos del ayer" ya que la estaban pasando por Canal Encuentro y hacia mucho que no la veía. Honestamente no recuerdo cuando fue la ultima vez que la vi pero siempre se mantuvo fresca en mi memoria. Pero esta vez, me di cuenta de que cada vez que la vi pude percibir algo distinto. Recordaba perfectamente la narrativa y las escenas sin embargo no las interpretaba de la misma manera. 


Taeko Okajima es una joven de 27 años que nació y creció en Tokyo pero siempre tuvo curiosidad de la vida en el campo. Ahora que una de sus hermanas se ha casado con un hombre que tiene familia que trabaja en el campo, utiliza sus vacaciones para experimentar esa vida. Pero su yo del quinto grado decide acompañarla y recuerdos de esa época no dejan de surgir de su cabeza. 


Así Taeko revive los momentos de su niñez cuando estaba comenzando su transformación a una joven mujer; mientras se vuelve a encontrar a ella misma en una nueva etapa de su vida. A lo largo de la película, la protagonista recuerda y reflexiona distintos momentos del año 1966, con la mirada de una mujer. El auto descubrimiento de Taeko se puede resumir en su teoría sobre las fracciones: ella considera que las personas que no tuvieron problemas en aprender a multiplicar y dividir fracciones no tienen muchos problemas en la vida. Se da cuenta que aunque, no es una persona muy lista tiene una forma diferente de pensar a los demás y por eso se cuestionaba todo. Ella tiene una forma particular de mirar el mundo, distinta pero no tiene porque ser algo raro o malo. Empieza a aceptarse como es y a entenderse mejor. 


Al mismo tiempo, nos muestra como es la dinámica familiar  a mediados de los sesenta en Japón. Una temática que siempre se encuentra presente en las historias de Isao Takahata, director y co-fundador del Studio Ghibli. Podemos observar que nadie discute con el padre y se hace lo él dice. Como ella ve como esa época marco a sus hermanas mayores por la moda, con la minifalda; o por la música, con la llegada de The Beatles a la isla. Taeko de pequeña estaba abierta a la aventura y aprobar nuevas cosas, por eso le pide a su padre un ananá de verdad y no de lata. Su padre le concede el deseo pero ninguno sabe como cortarlo, hasta que la hermana mayor consigue la información es que pueden comerlo. Hoy en día seria muy fácil con un tutorial de YouTube, pero hace 50 años en un país que desconoce el fruto era experiencia completamente nueva. Las distintas reacciones de los integrantes de este núcleo familiar nos muestra de forma sutil sus personalidades. 



Por otro lado, tenemos el romance. Nos encontramos en un cambio de era donde las mujeres pueden decir en trabajar y no casarse. Aunque para sus hermanas mayores debe apresurarse en hacerlo, Taeko parece no tener interés. Para ella es normal que a su edad todavía no este casada ya que también tiene amigas en la misma situación. Ve el matrimonio de forma distinta no es algo que debe hacer sino algo que puede elegir hacer cuando lo considere correcto. Taeko al llegar al campo se encuentra con el primo segundo de su cuñado, Toshio. Cada vez pasan mas tiempo juntos y hablan mucho. Ella encuentra alguien en quien puede confiar, abrirse sobre todos esos recuerdos que están surgiendo y que le pueden dar otra opinión. Taeko recuerda un compañero que era muy pobre y que a los demás no les agradaba. A ella tampoco pero intentaba ser buena con él. Cuando se transfirió de colegio, la maestra los obligo a todos a darle la mano para despedirse. Nadie quería, incluido el niño; y la ultima era Taeko, a la cual le negó la despedida. Ella siempre pensó que era porque seguramente era la que más odiaba. Sin embargo, Toshio considera que es todo lo contrario y que es porque era en la que confiaba. Así, Taeko se da cuenta que no siempre va poder comprender los sentimientos de los demás, y a veces ni los suyos. 



"Recuerdos del ayer" es capaz de unir estas tres perspectivas de la vida en Japón a través de los ojos de una joven mujer. Considero a Takahata, como una persona que viene te cuenta una historia sobre la cultura japonesa y te deja pensando por el resto de tu vida. Con una premisa simple es capaz de hacernos simpatizar con sus personajes aunque no hayamos vividos en la misma época o no hayamos vivido las mismas experiencias. Creo que una gran mayoría puede identificarse con Taeko (yo me identifico bastante), en su búsqueda de ella misma en su yo del pasado.