Shinichi Chiaki es uno de los mejores pianistas y violinistas de la universidad pero su verdadero sueño es convertirse en director de orquesta. Es arrogante, critico y en extremo perfeccionista lo que lo lleva a pelearse con su profesor de piano. Ahora esta bajo la tutela del profesor con fama de encargarse de los "fracasados" junto a Noda Megumi. Ella es extrovertida, hiperactiva y un poco rara; quiere ser instructora para niños y por eso no se enfoca demasiado en las competiciones.
Chiaki sufre de ansiedad al viajar y su mentor Viera se encuentra en Europa, y por eso tiene dificultad de seguir su sueño ya que tampoco acepta a nadie más como su instructor.
Un romance acompañado con la bella música clásica y grandes dosis de comedia. Aunque el manga es espectacular carece de la música que nos trasmite los sentimientos de los personajes y por suerte tenemos las geniales adaptaciones en animación y live-action.
Como no querer a Nodame, en el primer momento que aparece te hace adorarla. Y obviamente, Chiaki no es la excepción aunque lo niegue al principio, se puede ver a simple vista su cariño.
La mayoría de la comedia viene por parte de ella y Stresemann que se interpone entre ambos para probar su amor; haciéndolo crecer y acercándolos cada vez más.
Todos los personajes son queribles, no hay nadie que se pueda odiar, capaz algunos son molestos pero no generan odio.
Los openings y endings están muy bien logrados y se acoplan perfectamente a la esencia de la serie. Algunos tienen como base música clásica, los que lo hacen la perfecta elección. En el dorama reutilizan las mismas partituras y se vuelve un poco monótono, pero son tan pegajosas que se disfrutan las interpretaciones cada vez. Las gesticulaciones de los actores están muy bien logradas, tanto en la comedia como en los momentos que tocan los instrumentos.
Acompañar a Nodame en su sueño de crecer en la música junto a Chiaki para luego poder crear hermosa música juntos.
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